Las tendencias en marketing digital que se consagraron por la pandemia

Las tendencias en marketing digital que se consagraron por la pandemia

“Lo único constante es el cambio”, dice el refrán. En el último año y medio, a raíz de la pandemia, los consumidores evolucionaron notablemente en sus hábitos digitales. Frente a esto, estrategias de marketing digital previamente geniales pueden resultar hoy obsoletas.

El efecto más claro de la pandemia en el comportamiento de los consumidores fue el rápido abandono de las tiendas físicas por las plataformas de ecommerce. Pero los cambios continúan: ahora está creciendo el fenómeno de las compras sociales.

Así es como en el último año las empresas se han apresurado a establecer una presencia más fuerte en las redes sociales con el fin de "contribuir a la conversación sobre su marca".

Desde la ejecución de búsquedas en Twitter y hasta en el tradicional Google, las compañías han tenido que encontrar formas innovadoras de generar conversación online para tener la oportunidad de ofrecer información relevante para los clientes.

De esta manera, lo que funcionaba en el pasado dejó de ser efectivo. Por ejemplo, antes había ciertas horas del día que se consideraban horas pico para realizar publicaciones de marketing en redes sociales.

También hubo ciertos tonos de contenido, palabras y estilos que eran geniales, directos o considerados "reales" antes de la pandemia que ahora se perciben insensibles y duros a la luz de las actitudes sociales cambiantes.

De la misma manera, muchas marcas han tenido que evitar el uso de ciertas imágenes y videos como consecuencia del avance del Covid-19.

En simultáneo, están apareciendo nuevos fenómenos, tales como los eventos online y en vivo de ecommerce, que se transmiten vía streaming.

Evidentemente, el nuevo contexto mundial impuso a los especialistas de marketing digital la necesidad de contar con nuevos datos para entender al mercado así como  de nuevas estrategias para abordarlo.

De esta manera, se puso en evidencia que estamos ante una disciplina que requiere capacitación continua no solo para entender al cliente sino también respecto a las herramientas disponibles para llegar a ellos. La buena noticia es que esta actualización de conocimiento se puede hacer a distancia, de forma rápida y en base a casos prácticos.